La lotería le vuelve a tocar al Sevilla y a Guttman. Emocionante empate de ida y vuelta.

Jornada: Final de la Europa League

Fecha: Miércoles 14 de mayo de 2014

Hora: 20:45h

Estadio: Juventus Stadium (Turín)

Árbitro: FELIX BRYCH (Alemania)

Alineaciones:

·        SEVILLA F. C.

Beto, Alberto Moreno, Fazio, Nico Pareja, Coke, Carriço, Mbia, Reyes (min. 78), Rakitic, Vitolo (min. 110) y Bacca. Marin (min. 78) (min. 104), Gameiro (min. 104), Diogo (min. 110).

·        BENFICA

Oblak, Maxi Pereira, Luisao, Garay, Siqueira (min. 99), André Gomes, Amorim, Gaitán (min. 119), Sulejmani (min. 25), Lima y Rodrigo. Almeida (min. 25), Cardozo (min. 99), Cavaleiro (min. 119).

Goles: Tanda de Penaltys 0-1 Lima; 1-1 Bacca; 1-1 Cardozo falla; 2-1 Mbia; 2-1 Rodrigo      falla; 3-1 Coke; 3-2 Luisao; 4-2 Gameiro.

Final de gala, con unos equipos de gala y con un estadio de gala. Partido a cara o cruz entre dos escuadras que buscaban la gloria europea. Los portugueses, aterrizados en la competición desde la Champions League, afrontaban su segunda final consecutiva en esta competición en busca de enterrar el mito o la maldición en este caso de Guttman, quien predijo a su marcha, hace 52 años, que sin él el conjunto luso no volvería a ganar una final europea. Los chicos del Sevilla debutaron ya hace unos cuantos meses en esta competición. Ni más ni menos que un primero de agosto en la tercera ronda previa ante el Podgorica montenegrino. Más de nueve meses después y con la friolera de 18 partidos en su haber, llegaba a la gran final de su competición fetiche.

La final comenzaba con respeto en ambos equipos pero con algo de iniciativa de los lusos. Las tornas cambiaron tras la lesión de un jugador lisboeta en el minuto 25 y las ocasiones hispalenses se hacían más claras hasta justo antes del minuto 40 donde otra vez los portugueses aumentaban el ritmo y Beto empezaba a darles la noche con sus intervenciones. Maxi Pereira se quedaba solo ante él, pero una mano salvadora llevaba a los dos equipos con empate a los vestuarios.

El segundo acto comenzaba otra vez con el Benfica buscando el gol pero ahora se sumaban a las ayudas los centrales sevillistas, en especial Pareja, imperial todo el partido. Los minutos pasaban y el Sevilla se iba quedando sin aire poco a poco. Los cambios no ayudaron demasiado y al final se buscaba la prórroga con mucha ansiedad. El Benfica, con más oportunidades, sobre todo a balón parado y en las botas y cabeza de uno de sus centrales, Garay, no encontró ese gol que les llevara hasta el título. La prórroga era un hecho.

Otros 30 minutos de infarto. Muchos nervios en ambas escuadras ya que un fallo a esas alturas les condenaba al subcampeonato. Las penas máximas casi no se llegaron a disputar porque el delantero de nervión Bacca dispuso de un mano a mano con el guardameta Oblak, pero su disparo se marchaba algo desviado al querer apurarlo en demasía.

La lotería de los once metros proclamó campeón el conjunto español, llevándose su tercer entorchado en los últimos ocho años. Igualan a Liverpool, Inter de Milán y Juventus con el mismo número de trofeos. El Benfica, con su octava final perdida de manera consecutiva, se marchaba de vacío del Juventus Stadium. La sombra de Bela Guttman cada vez se está haciendo más alargada y ojalá que esa maldición, más pronto que tarde, se rompa.

¡Enhorabuena Sevilla!

Crónica realizada por Enrique Álvarez (@enriqueah10).