El
Barcelona recuperó el liderato que había perdido de forma momentánea con una
goleada frente al Málaga mostrando sus virtudes y recuperando sensaciones.
Semana
de contrastes en Camp Barça que llegaba a su fin con los de Martino buscando
recuperar la primera plaza después de las victorias del Atlético y del Real
Madrid. Todas las miradas estaban puestas en el palco ante el primer encuentro
de Josep María Bartomeu como presidente tras la dimisión de Sandro Rosell. Y
con varias pancartas solicitando elecciones en las gradas. Incertidumbre es lo
que se vivía en los minutos previos al encuentro con la interrogante de si
afectaría la actual situación del club a los jugadores ante un partido
importante. Los aficionados comprobaron la respuesta nada más indicar Clos
Gómez el inicio. Fútbol brillante, movimientos de balón rápidos, jugadas de
gol, ocasiones…En definitiva, lo ‘externo’ no había hecho mella en los protagonistas.
Schuster
ya había avisado que iba a jugar como en el partido de La Rosaleda, es decir,
con el equipo muy juntito, atrás, intentando resguardarse lo máximo posible y
buscando alguna contra que pudiera sorprender a los locales. La puesta en
escena y la idea eran buenas, pero luego hay que contar con la respuesta del
rival. Jugar en estos estadios, con las diferencias que existen hoy en día
entre los primeros y el resto, es una odisea que algunas veces se convierte en
un castigo. Y la penitencia del Málaga iba a durar muchos minutos.
Desde
el inicio el Barcelona tomó las riendas. Con un Xavi inspirado, aprovechando
las bandas por las que entraban Alves y Jordi Alba como flechas, el Málaga
comenzó a sufrir. Las ocasiones comenzaron a llegar, con un Pedro rompedor y
con un Piqué jugando muchos minutos como delantero centro y probando fortuna en
distintas ocasiones. Caballero comenzó su recital con intervenciones de todos
los colores, cerrando todos los huecos y poniendo nerviosos a sus rivales. Incluso,
Víctor Valdés tuvo que repeler un lanzamiento de falta de Duda y un espléndido
remate de cabeza de Tissone que ya se colaban en su portería. Pero el cántaro
se tenía que romper y se rajó en el minuto 40 de la forma más rara. No lo había
conseguido el Barcelona de jugada trenzada y lo iba a obtener a balón parado.
Alexis tocó un balón al segundo palo y Piqué, completamente sólo, fusiló a
Caballero. La bronca de Caballero a Sergio Sanchez, que había permitido el
remate, continuó hasta que ambos conjuntos se fueron a los vestuarios en el
descanso. Si el Málaga tenía alguna esperanza de puntuar el tanto del central
culé le dio la puntilla.
La
segunda mitad duró en realidad quince minutos. Fue lo que tardaros los
azulgranas en colocar otros dos goles en el casillero por medio de Pedro y
Alexis. La última media hora sobró. El Málaga ya estaba entregado, casi
exhausto e izó la bandera blanca. Apenas pudo llegar, aunque aún tuvo un par de
ocasiones para recordar a sus aficionados que tiene la pólvora más que mojada.
444 minutos lleva si anotar un gol aunque cree multitud de oportunidades. Es un
problema que tendrá que subsanar Schuster si no quiere meterse en muchos
problemas.
La
última media hora sólo sirvió para dar descanso a determinados jugadores y para
que el público se marchara contento del Camp Nou. También para ver a Messi en
labores organizativas. En los últimos encuentros no ha marcado, pero se ha
convertido en el asistente ideal de los delanteros. Y sino que se lo digan a
Tello, Pedro o Alexis.
Vuelve
al liderato el Barcelona, que finalizando enero recobra sensaciones y se
muestra más rocoso, intenso y voraz. Ha mejorado en condición física y comienza
a asfixiar a sus rivales cuando deben sacar el balón de atrás. Recupera pronto,
es rápido y crea ocasiones de gol. Casi una copia del mejor Barcelona de
Guardiola, aunque aún le quede margen de mejora. Por su parte, el Málaga
comienza ahora su segunda vuelta. Con sólo dos puntos de margen sobre el
descenso deberá mejorar sobre todo en ataque. La lesión de Santa cruz puede ser
un problema.
- FICHA TÉCNICA -
2 -
Barcelona: Valdés; Alves, Piqué, Mascherano, Jordi Alba; Cesc,
Xavi (Sergi Roberto, min. 78), Busquets; Pedro (Tello, min. 61), Messi y Alexis
(Afellay, min. 86).
0 - Málaga: Caballero;
Angeleri, Sergio Sánchez, Flavio, Antunes; Juanmi, Camacho, Tissone (Darder,
min. 81), Duda; P. Pérez (Morales, min. 66) y Santa Cruz (Pawlowski, min. 25).
Goles: 1-0, min 39:
Piqué. 2-0, min. 54: Pedro. 3-0, min. 60: Alexis.
Arbitro: Clos Gómez,
Col. Aragonés. Regular. Mostró tarjetas amarillas a Piqué del Barcelona y a P.
Pérez, Duda y Flavio del Málaga.
Incidencias: 60.000 espectadores en el Nou Camp. Primer
partido de Josep María Bartomeu como presidente tras la dimisión de Sandro
Rosell.
Crónica realizada por Javier Costillas (@CosimonJav)
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