El Atlético de Madrid salvó los muebles a pocos minutos del final merced a un tanto de Arda Turán que da oxígeno a los rojiblancos. La Juve, muy seria y con empaque, llevó la iniciativa durante el encuentro pero se dio de bruces contra el muro de Simeone.
El encuentro ya cinco minutos antes de empezar prometía espectáculo: gradas a reventar, colorido, el rugido de la afición y un superhéroe suelto por el campo con máscara. Dos grandes de Europa, uno recién bautizado y el otro con años de leyenda inauguraban la Champions en una final con el mejor escenario posible. Todo a favor para un espectáculo digno de recordar, pero el buen hacer defensivo de ambos conjuntos deslució, y mucho, el duelo. Tras el pitido inicial se mezclaron las prisas y el ímpetu para dejarnos diez minutos de pura pelea en el centro del campo. Se preveía una bonita disputa en la sala de máquinas que, a la postre, sería culpable de las pocas ocasiones de gol. Los primeros acercamientos a portería los protagonizaron Raúl García por parte de los locales, con un cabezazo que se marchó desviado, y Marchisio por los italianos con un disparo desde la frontal que no encontró portería. Pocas oportunidades más habría en una primera mitad en la que la Juve tuvo una posesión estéril fruto del entramado que armó el Cholo en defensa. En el minuto 24 el Atleti hizo su único disparo a puerta en los primeros 45 minutos tras sorprender a los italianos presionando con tres hombres la salida del balón y generando un disparo franco para Mandzukic desde la frontal al que Buffon respondió bien. Los de Allegri no se amedrentaron y siguieron llevando la iniciativa, una iniciativa que muy cerca estuvo Pogba de trasladar al marcador si su disparo desde la línea del área en el minuto 32 no se hubiera marchado a centímetros del palo izquierdo de Moyá. Con esa oportunidad moriría una primera parte que supuso un baño de realidad a la euforia inicial y que estuvo marcada por una tremenda igualdad en todos los aspectos. Dos equipos netamente defensivos que jugaron a no perder y a esperar lo que depararía la segunda mitad.
Los jugadores del Atlético celebran el gol de Arda |
Con la conclusión de los 90 minutos, respiro de alivio para la parroquia colchonera. El Atlético de Madrid superó su primera final seria de la temporada ante un rival inmejorable como la Juventus, que plantó cara y llevó el encuentro a un punto de igualdad extrema. Simeone y su rigor táctico volvieron a llevarse el gato al agua en una noche en la que a pesar de las dificultades, el Atleti volvió a presentar su candidatura a favorita.
Autor: Hugo Fernández (@HugoFer9).
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