Un
gol de Götze en la prórroga dio la cuarta estrella a Alemania e hizo justicia a
una generación de futbolistas irrepetibles que desde hace una década amenazaban
con subir al Olimpo. Argentina dio la talla, pero falló en los momentos
decisivos ante el gol.
Como
en todo Mundial que se precie, la final enfrentaba a dos conjuntos con
trayectorias y sensaciones diferentes a lo largo de cuatro semanas. Por un
lado, Alemania se presentaba en Maracaná con los mejores avales. Había fundido
literalmente a Brasil en la semifinal y a Portugal en su debut, aunque entre
medias había mostrado ciertas dudas. Enfrente una Argentina con el sello de
Sabella y de Messi, un equipo que pasó la primera fase sin problemas -en un
grupo muy flojo, todo hay que decirlo- pero que fue creciendo con el transcurso
de los partidos de la mano de Messi y, sobre todo, de un imperial Mascherano.
Aunque la FIFA reconoció a la 'pulga' con el Balón de Oro -más que discutida
esta decisión- su compañero en el Barcelona fue el verdadero artífice de que
los sudamericanos alcanzaran la final y estuvieran vivos hasta la conclusión de
la prórroga. En su puesto, en el medio centro, demostró que sabe estar y que no
se pierde. Deberá tomar nota Luis Enrique para no cometer errores pasados.
Sin
embargo, el protagonista de la final iba a ser Götze. Había perdido su puesto
de titular después de un par de actuaciones muy flojas, pero anoche volvió a
ejercer de revulsivo en el momento más oportuno. Corría el minuto 112 cuando
Alemania continuaba asediando el área argentina, con más o menos ocasiones. Por
fin, otro secundario, Schürrle, que había entrado por el conmocionado Kramer en
la primera mitad, se deshizo de su par
por la banda izquierda. Centró al área y ahí apareció la figura del héroe, del
Iniesta teutón. Mario Götze, con una calidad excepcional, controló el esférico
con el pecho, se giró y cruzó el balón ante la salida de un sorprendido Romero.
Era el gol definitivo, el que cerraba un campeonato y que colocaba la cuarta
estrella en las camisetas germanas. Hasta el final hubo sólo emoción, con
Argentina sumando hombres en ataque y enviando balones al área para ver si en
una de éstas alguien recogía un rechace, un tiro, para igualar la contienda. No
pudo ser y Alemania, justamente, se llevó la victoria.
A
pesar de que sólo se vio un gol, el partido fue entretenido, bonito, con
ocasiones y jugadas para ambos contendientes. La primera mitad fue alemana, aunque
Higuaín tuvo la más clara pero falló de forma clamorosa ante Neuer. Kroos
cometió un error infantil y golpeó de cabeza hacia su portería, por allí andaba
despistado el 'Pipa', con toda una pradera por delante, pero su pésimo disparo
salió fuera. Luego consiguió marcar, pero estaba en claro fuera de juego y el
tanto no subió al marcador. Las carreras y las contras de Messi y Lavezzi
hicieron sufrir a Hummels, pero Alemania salió viva y también pudo marcar en
distintas ocasiones que atajó bien Romero. Y la que no paró se estrelló contra
el poste. Fue ya en el descuento cuando Howedes entró en el área como una
bestia para rematar un córner y romperla contra el palo. Tras este susto
argentino los futbolistas se fueron al descanso.
La
segunda mitad contó con más dominio argentino, pero sin apenas crear peligro. Sólo
Messi pudo marcar en la primera jugada, pero lanzó muy cruzado. Con Lavezzi
reventado en el banquillo, el capitán celeste se diluyó y comenzó a pasear. Lo
notó su equipo, que vivía atado a la lucha y a la casta de Mascherano.
Alemania, también muy cansada, seguía jugando al toque, con balones cortos,
pero sin generar peligro. La prórroga, la octava del Mundial, era un hecho. Y
aquí la tuvo de nuevo el conjunto de Sabella. Un balón perdido llegó a Palacio,
que la elevó por encima de Neuer pero se marchó fuera. Faltaban más de veinte
minutos y Alemania cogió las riendas de forma definitiva. Hasta que llegó el
referido minuto 112 y se reescribió la historia.
Alemania
se hace con su cuarto título y deja a Argentina con las ganas. Lo mereció por
su juego durante el campeonato, aunque tuvo un rival digno y difícil de roer.
Recoge el guante de España con un conjunto relativamente joven que disfruta con
el balón y además sigue teniendo los genes de sus antecesores. Sin duda, el
digno recambio de 'La Roja'.
- FICHA TÉCNICA -
0- Argentina: Romero; Zabaleta,
Demichelis, Garay, Rojo; Pérez (Gago, min. 86), Mascherano, Biglia, Lavezzi (Agüero,
min. 46); Higuaín (Palacio, min. 77) y Messi.
1 - Alemania: Neuer; Lahm, Boateng,
Hummels, Howedes; Schweinsteiger, Kramer (Schürrle, min. 31), Kroos, Ozil
(Mertesacker, min. 120); Müller y Klose (Götze, min. 88).
Gol: 0-1, min. 112: Götze.
Arbitro:
Nicolás Rizzoli (Italia), bien. Mostró tarjetas amarillas a Schweinsteiger y
Howedes de Alemania y a Mascherano y Agüero por parte argentina.
Incidencias:74.738
espectadores abarrotaron el Estadio Maracaná de Río de Janeiro.
Crónica realizada por Javier Costillas (@CosimonJav).
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